CURSO DE SEXTANTE NAVEGANDO, METODO PETREL ADAPTADO A TODAS LAS TITULACIONES: PER, PY, CY y PPER. 16-18 MARZO 2018.
El Método PETREL se basa en orientarse siguiendo prácticas comunes a Vikingos, Arabes y Portugueses, es decir, en NAVEGAR SIGUIENDO UN PARALELO. Para ello, es fundamental que los Alumnos aprendan a obtener la Latitud directamente, por observación de la Altura de la Polar y la observación de la Altura Meridiana de Sol. Este Método, fruto de muchos cálculos y millas de navegación de altura y oceánica del Autor, permite a los navegantes obtener su posición en altamar, sin ayuda de calculadora y sea cual sea su Titulación Náutica.
El contenido del Curso, por consiguiente, está orientado hacia este fin. Para ello, se toman alturas de la Polar y de Sol, principalmente, pero sin olvidar el resto de astros: Estrellas, Planetas y Luna, esta última imposible de observar en esta Edición, debido a que se encontraba en la Fase de Luna Nueva (el aplazamiento del Curso por el mal tiempo fué la causa). También se refrescan conceptos de Navegación Astronómica imprescindibles: Hora Reloj Bitácora, Coordenadas Terrestres, Ecuatoriales, Horizontales y Uranográficas, sólo por citar algunos.
El Sextante no se aprende ni con el barco fondeado ni en la escollera del Puerto; tampoco se debe determinar el Error de Indice mirando postes de la luz y cornisas de tejados: ¿alguien se ha encontrado alguna vez con esos objetos en Altamar, ó en medio del Océano?.
Zarpamos de Marina Badalona el Viernes a las 1800 Ho. con destino al Delta del Ebro, única zona donde podríamos encontrar el cielo despejado ese fin de semana. Una vez en mar abierto, la primera actuación consistió en corregir los Espejos del Sextante y obtener el Error de Indice mirando al Sol, que es el sistema profesional de hacerlo. Se calcularon los intervalos exactos de observación de los Crepúsculos Vespertinos y Matutinos y de la Meridiana del Sol. Durante los Crepúsculos se observaba la Polar y los Planetas, en esta Edición, Venus; también se tomaban enfilaciones en el Firmamento para identificar estrellas de primera categoría: Riegel, Sirius, Aldebarán y Betelgeuse, mucho más fáciles de manejar por un principiante. Por último, intentamos tomar alturas con el Horizonte Artificial del Capitán, pero sólo a título meramente informativo, dada la dificultad que conlleva para los principiantes esta práctica de sextante.
Las condiciones de frío, mar y viento fueron adversas en todo momento, circunstancia que nos obligaba a navegar con dos rizos. Para acabar de añadir más dificultad a la Empresa, en la madrugada del Sábado se averió el motor, lo que nos obligó a regresar al puerto base y cambiar de barco; la entrada la hicimos a vela, como los buenos marinos. A pesar de los muchos contratiempos, siempre reinaron a bordo la camaradería, la actitud proactiva y el buen humor, sobre todo a la hora de las comidas, que compartíamos todos juntos. Como es costumbre en PETREL, se valora la Buena Mesa, a destacar en esta Travesía: Keftele, Shropshire Blue, Bocartes caseros, Garnacha para mitigar el frío de las noches de guardia y Pacharán para favorecer la digestión.
Quiero acabar esta Crónica haciendo especial hincapié en las enormes ganas de aprender y el espíritu de superación que mostraron los Alumnos en todo momento, a pesar de las Noches de Guardia, los madrugones de los Crepúsculos Matutinos (0550 Ho) y las muchas horas de Teórica que se les impartían entre Práctica y Práctica con el Sextante. Les queda mucho camino por delante antes de que sean capaces de orientarse con el Sextante, pero el Primer Paso, el más difícil, ya lo han superado con creces.
